Todo lo anterior está incluído en la localidad de Cueto dentro del municipio de Santander.
Está concebido con senderos como un parque para andar y hacer footing. Por eso le hemos llamado Senda de Mataleñas. En los carteles consta como Circuito Físico de Mataleñas.
Cuenta con aparatos de madera para realizar ejercicio físico cada poca distancia.
Mide unos ochocientos metros de largo con senderos que lo circunvalan por dentro, una parte cerca de la valla que lo separa del campo de golf y por la otra del muro de la Avenida del Faro.
Está poco frecuentado y es un paseo tranquilo y con mucha sombra. Estamos en la ciudad pero dentro de él parece como si nos hubiesemos trasladado por un momento a un pequeño bosque.
Debido a que es una zona más profunda que el terreno que lo rodea y además el arbolado, vallas con vegetación y el muro alto hacen que apenas sople el viento por lo que incluso en invierno es un paseo agradable.
En la siguiente imagen de Google Maps vemos el Parque de Mataleñas en Santander.
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Empezamos nuestro paseo desde cerca de la costa, al lado de la Playa de los Molinucos, que la dejamos a nuestras espaldas.
Hay un estanque con aves acuáticas que se surte de agua del arroyo que vemos a continuación y que nos acompaña en parte del recorrido.
A nuestra derecha tenemos el Campo Municipal de Golf de Mataleñas, que está separado con una valla con abundante vegetación y redes protectoras en diversas zonas.
Nos asomamos por encima de la valla y vemos a dos jugadores en el tee de salida de un hoyo.
Avanzamos por el sendero con una ligera cuesta arriba. A la derecha vemos vegetación que nos separa del campo de golf.
Los senderos están en buen estado y es fácil caminar por ellos.
De vez en cuando hay otros que los atraviesan transversalmente por si alguien desea volverse sin tener que llegar a rodearlo del todo.
Vemos el abundante arbolado de todo el recorrido.
Estamos llegando a la parte superior del camino donde nos encontraremos con el muro para volver al punto de partida.
Hay varias puertas de entrada y salida a la Avenida del Faro y también se comunica cerca de la Playa de los Molinucos con el Parque de Mataleñas.
Otra vez nos asomamos al campo de golf.
Vemos que está muy bien cuidado.
Desde este campo las vistas son magníficas.
Hemos llegado a la parte superior.
Hay una puerta a nuestro lado, a la derecha.
Rodeamos el paseo por dentro.
Aquí vemos una zona con un claro entre los árboles en que ha crecido abundante hierba.
El sendero está trazando la curva para volver hacia atrás.
Un poco más adelante hay un aparato de madera para realizar ejercicios físicos.
De estos hay varios y de distinto tipo a lo largo del recorrido.
Seguimos nuestro camino al lado del muro y tenemos otro aparato para otro ejercicio físico. Todo ello está perfectamente indicado en cada punto del camino.
Aquí vemos el sendero de vuelya y a la izquiera un poco más abajo el camino por pasamos antes con el arroyo enmedio.
La anchura varía de zonas de cincuenta metros a otras de doscientos en la parte más ancha.
El camino de vuelta es llano, por eso según regresamos va siendo más alto que el de ida. Aquí lo vemos más claramente.
Ya llegamos al final del sendero, en la zona donde se comunica con el Parque de Mataleñas. Tenemos delante más aparatos de ejercicios físicos.
El muro se abre para comunicar con el Parque de Mataleñas que es el que tenemos delante, con la Península de la Magdalena al fondo.
Todo un lujo contar en Santander con esta maravilla
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